
Resulta muy triste observar como nuestros ríos humanizados debido a diversas afecciones ambientales: locales, globales, conocidas y desconocidas, no son capaces de regenerarse por sus propios medios.
Estos días en el blog hablábamos de las afecciones de índole global, como cambio climático, que originan inviernos suaves con fuertes deshielos en diciembre - enero los cuales generan la pérdida de la freza y del reclutamiento juvenil del siguiente año.
Los técnicos de Comunidades Autónomas limítrofes como Aragón están planteando otro modelo de gestión, también sostenible, que está permitiendo la ampliación de la temporada hábil para la pesca desde marzo hasta octubre. Este modelo basado en la pesca C/S y el apoyo de sus poblaciones con la repoblación de sus aguas con alevinaje genéticamente autóctono y la colocación de cajas vibert permite un mayor disfrute de la actividad por parte de los pescadores (importante labor social, deportiva y recreativa de esta actividad) y ayuda a desestacionalizar la temporada (la pesca puede ser un importante motor económico y turístico sustentable que ayude al desarrollo rural).
¿Qué opináis vosotros al respecto?
